POR ACAN EFE
GUATEMALA
CIUDAD DE GUATEMALA - El presidente de la Asociación Justicia y Reconciliación (AJR),
Benjamín Jerómino, denunció en rueda de prensa que los abogados de los
militares han presentado una serie de acciones judiciales sólo con el
fin de retardar los procesos judiciales y evitar el avance de la
justicia.
El abogado César Calderón, defensor del exgeneral José Rodríguez,
logró ayer que el juez Miguel Angel Gálvez, titular del Juzgado B de Mayor
Riesgo, dejara en suspenso de forma indefinida el proceso de genocidio que se
había reanudado el pasado lunes contra su cliente,Ríos Montt y
el exgeneral Héctor
Mario López.
Calderón presentó una acción en la que argumenta que
el Juzgado no tiene competencia para conocer el proceso si antes una Sala de
Apelaciones no determina esas facultades.
En un comunicado leído por Jerónimo,
28 organizaciones humanitariascalifica de “obstáculos frívolos” e
“improcedentes” las accionesde los militares que buscan ser
amnistiados en base a la Ley de Reconciliación Nacional.
En ese sentido, el
abogado de las víctimas, Edgar Pérez, explicó que esa ley no es aplicable para
los delitos de genocidio y lesa humanidad.
“Hay mala fe en el uso
de los recursos que la ley prevé” pero las acciones sólo son “estrategias
dilatorias y entorpecimiento del proceso” , aseguró.
Los tres exgenerales
guatemaltecos son procesados por más de mil 700 asesinatos de indígenas ixiles
entre 1982 y 1983, pero debido a las múltiples acciones judiciales de sus
abogados, el juez no ha podido resolver si procede o no llevarlos a un juicio
oral.
Pérez explicó que además de la acción presentada ayer por Calderón, el
juez tiene que resolver otros seis incidentes que aún están pendientes.
Ríos
Montt, de 85 años, es acusado por la Fiscalía y por el no gubernamental Centro
de Acción Legal para los Derechos Humanos (Caldh) de ser el
responsable de las matanzas de civiles ocurridas durante los 18 meses que
gobernó de facto Guatemala, entre marzo de 1982 y agosto de 1983.
López,
quien fuera jefe del Estado Mayor de la Defensa, y Rodríguez, ex director de
Inteligencia, también son acusados por la Fiscalía de los delitos de genocidio
y de lesa humanidad entre 1982 y 1985.
Ríos Montt se encuentra en arresto
domiciliario desde enero pasado, cuando de forma voluntaria se presentó ante la
Justicia.
López y Rodríguez, detenidos en junio y octubre de 2011, están
recluidos en un centro de salud, el primero por padecer un cáncer terminal y el
segundo por quebrantos de salud de origen no determinado, según han señalado
sus abogados.
Los tres militares eran los de más altos cargos que tienen
abierto proceso judicial por genocidio durante el conflicto armado en
Guatemala, que dejó unas 200 mil víctimas, entre muertos y desaparecidos, entre
1960-1996.
Otro ex general implicado en delitos de genocidio, Oscar Mejía
Víctores (1983-1986) quedó en libertad en diciembre pasado luego de que
el tribunal lo declaró incapaz de afrontar un juicio debido a un derrame
cerebral que sufrió, luego de haber entrenado a la justicia en octubre de 2011.
No hay comentarios:
Publicar un comentario